Ecuador es un país en donde su gente habla y consume fútbol en mayor proporción a los demás deportes. Lastimosamente, más son las decepciones que los gratos momentos de victoria y algarabía. Aun así, la cantidad de dinero que genera y mueve la industria del balompié es incomparable con otras disciplinas que tratan de abrirse camino en un mundo futbolizado.

Una de esas disciplinas que han venido trabajando silenciosamente es el ciclismo, de la mano de Richard Carapaz. El joven, de 28 años, especializado en caminos empinados de montaña por su preparación en la Sierra ecuatoriana, ha sido la sorpresa en las últimas grandes competencias, en las que obtuvo destacados resultados.

Fue ganador del Tour de Italia en el 2019, subcampeón de la Vuelta a España en el 2020 y obtuvo el tercer puesto en el podio del Tour de Francia 2021, por mencionar sus últimas y más importantes carreras. El carchense es la ‘carta brava’ del equipo inglés Ineos, que le abrió sus puertas al ver su potencial. Su próxima competencia será en los Juegos Olímpicos de Tokio, donde parece ser un gran opcionado para ganar medalla.

Él cuenta que su niñez y adolescencia fue muy dura, ya que su familia era de escasos recursos económicos y por ende había que hacer muchos sacrificios para conseguir los implementos necesarios para poder practicar este deporte. Richard les ha demostrado a los ecuatorianos que los sueños se pueden hacer realidad. Y que sí se puede estar entre los más grandes.