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Opinión
Editorial: Consecuencias del invierno
Aparte de los males que se precipitan sobre la salud de las personas con motivo de la intensa época de lluvias.
Aparte de los males que se precipitan sobre la salud de las personas con motivo de la intensa época de lluvias, los daños que se producen en los espacios públicos como avenidas, calles, aceras y carreteras son muy graves y deberán ser reparados inmediatamente que cese la temporada lluviosa, que ya es, hasta la fecha, una de las más intensas, con precipitaciones tan copiosas que han dañado también edificios y viviendas.
Las calles de Guayaquil están sufriendo el impacto severo de las lluvias y se presentan graves daños con incontables baches que causan problemas en el tránsito motorizado y cuyos daños deberán ser reparados con la repavimentación que tendrá un elevado costo, porque los insumos han subido de precio y nuestro asfalto, como lo anotó alguna vez el alcalde Nebot, no es de buena calidad, lo cual aumenta la posibilidad de los daños en las vías de nuestra urbe.
El temporal lluvioso no parece tener un fin muy próximo y, como consecuencia de su intensidad y de su duración, los daños se incrementarán con las naturales consecuencias en los costos de las obras de reparación que deben ser impostergables...