Opinión
Editorial: las promesas de Lenín
Con su talante de hombre bueno, el nuevo presidente Lenín Moreno pasó su primera confrontación con el Poder, ratificando sus promesas electorales.
on su talante de hombre bueno, el nuevo presidente Lenín Moreno pasó su primera confrontación con el Poder, ratificando sus promesas electorales. Se mantendrá la dolarización de necesidad absoluta, económica y política, pues si alguien se atreviera a terminar con ella, sufriría un estallido social de consecuencias inimaginables. Prometió una actitud fluida con la prensa, pero nada dijo de la Ley de Comunicación, mordaza que puso Correa al pensamiento. Debe haber conciencia de que la Libertad de Expresión no es dádiva de los gobiernos, sino un derecho derivado de la condición humana.
Ratificó incrementar el bono solidario hasta 150 dólares mensuales y entregar gratuitamente a los más pobres 191 mil casas, de las 325 mil que promete construir.
Además, dejar en libertad a los jóvenes para que sigan la carrera universitaria de sus sueños, aunque nada dijo de la creación de 40 universidades técnicas.
Aparte de las promesas se siente en el país un nuevo estilo que dejaría atrás la persecución y confrontacional actitud de Correa. Y esto ya será bueno para su desenvolvimiento normal.