Editorial: Defensa del medio ambiente

En diferentes ciudades del mundo, miles de jóvenes hicieron manifestaciones en defensa del medio ambiente ante las peligrosas arremetidas naturales y humanas que atentan contra su pureza y, así, ponen en peligro la propia existencia del planeta.

Ante la presión de una juventud preocupada por el futuro de la humanidad, la ONU convocó a una cumbre de acción climática que se inició ayer en Nueva York, sede del organismo mundial.

Acuden a esta cita representantes de 60 países que han llevado planes concretos y realistas para imponer reglas de conducta y de acción en gobiernos, empresas y colectivos sociales que deben comprometerse a luchar contra esta crisis global que, paradójicamente, parece ser el producto de las modernas tecnologías industriales que, sin embargo de favorecer con sus adelantos a la sociedad humana, también la afecta al perturbar al propio aire que permanentemente se respira.

Se trata, pues, de garantizar un ambiente limpio y, aunque hay la certeza de que la reunión no resolverá tan grave problema mundial, se trata de un importante comienzo con el cual se educará a toda la humanidad que debe cuidarse a sí misma.