Editorial: Escasez de servicios higiénicos públicos

Las ciudades crecen a un ritmo muy acelerado aumentando con ello el número de su población que diariamente transita por la vía pública, ya con la necesidad de ir a sus lugares de trabajo y muchos por haber escogido las calles para realizar su actividad comercial.

Sin embargo de esta permanente presencia poblacional transitando en horas de la mañana, tarde y noche, no se han preocupado las autoridades, sobre todo municipales, de dotar a las urbes, sobre todo en las más pobladas, de los necesarios servicios higiénicos públicos que pueden ser usados por quienes ante urgentes necesidades tienen que transitar como peatones.

Posiblemente no se trata solamente de una negligencia de quienes están obligados a velar por la seguridad y la protección que se debe dar a las poblaciones citadinas, sino a que se ha constatado los continuos robos que la delincuencia comete llevándose los implementos de los servicios públicos a los que aludimos, pues se llevan tapas de las alcantarillas, cables telefónicos y hasta los bustos de bronce colocados en las calles en honor de prestantes ciudadanos.

Pero es que se debe ejercer una severa vigilancia para impedir estos frecuentes delitos que atentan contra la propiedad pública.