Opinión
Guayaquil de hoy y del futuro
Debemos empezar el año 2017 con optimismo, fe y gran convencimiento que el Ecuador es un país que no se doblega ni se doblegará ante nadie ni por nada.
De manera especial debemos destacar el presente y el futuro de Guayaquil, una ciudad pujante, trabajadora, solidaria con propios y ajenos, que está administrada actualmente por quienes la han confirmado en lo que siempre fue: en la “Perla del Pacífico”.
La actual administración municipal, sin demagogia alguna, sin poses altisonantes, sin frases peyorativas, deja el año 2016, y se prepara para el futuro, obras que significan un verdadero cambio estructural de la ciudad y un formidable acicate para la autoestima de quienes viven en la urbe.
El monumento del Cristo del Consuelo, el monumento a Guayas y Kil, la noria “Perla de la Perla”, constituyen indudablemente íconos que hacen de Guayaquil una ciudad modelo para muchas de América Latina.
Si a esto se agrega que está debidamente financiado el proyecto para la transportación masiva mediante la aerovía de Guayaquil a Durán y viceversa, así como el proyecto preparado para el año 2024 que el nuevo aeropuerto se trasladará a la zona de Daular, son acontecimientos trascendentales para su progreso y que demuestran el empuje de los guayacos y de las autoridades municipales que por ventura dirigen sus destinos.
¡Por esto, Guayaquil es el nervio, el músculo y el corazón de la patria!. (BLC)