Opinión
‘La ballena azul’
Ahora debemos tener un mayor cuidado con nuestros hijos, nuestros nietos y nuestros jóvenes de la avalancha de peligros en que pueden verse envueltos como consecuencia del uso indebido de las redes sociales en las que se ‘viralizan’ aspectos negativos para su formación moral, espiritual, cultural y física.
Últimamente está circulando profusamente en las redes sociales lo que se ha dado en llamar “La ballena azul”, que no es otra cosa que una bien planificada y organizada invitación de un joven ruso para que los usuarios de las ‘redes’ cometan actos que, finalmente empujados por el ‘tutor’ de este criminal programa, los induzca al suicidio, cosa que ha sucedido últimamente en otras partes de la Tierra.
Ante este inminente peligro, los padres de familia, los profesores de escuelas y colegios, deben dedicarse a ‘tiempo completo’ a vigilar a los niños y jóvenes. A hacerles ver que nada positivo sacan con el tan reiterado uso de las redes. A inculcarles, más bien, el estudio, la lectura; a hacerles ver los valores tan necesarios, y lamentablemente tan venido a menos en este momento en que vivimos actualmente, a nivel local e internacional.
Hagamos algo ahora, antes de que resulte demasiado tarde y cuando no podamos remediar los errores y las graves consecuencias de lo cometido; y para no tener que repetir aquella frase inmortal que dice “no debemos llorar como mujeres lo que no pudimos defender como hombres’’...
(BLC)