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Opinión

Editorial: ¿Una nueva Constitución?

La actual Asamblea Nacional en el pasado era una designación dada al cuerpo legislativo cuando, por lo general luego de un gobierno de facto, era necesario dictar una nueva carta fundamental que sustituya a la que había sido escrita por la dictadura. Y es que en el pasado para dictar y cambiar leyes se contaba con un Congreso Nacional de tipo bicameral con senadores y diputados, y entre los de la Cámara Alta se daba también la distinción entres senadores nacionales y funcionales.

Entre las propuestas de los diferentes candidatos a la Presidencia de la República existe la de convocar a un referéndum para decidir si se cambia por otra a la Constitución de Montecristi vigente, incluso si al iniciar este cambio se incluye regresar al viejo sistema ya superado, es decir a la legislatura integrada por dos cámaras.

También en estas propuestas de quienes encabezan los 16 binomios que participan en la lid electoral hay otras diferentes para darle a la legislatura un mayor impulso y hasta se ha llegado a la consideración de temas muy severos como sería la imposición de la prisión perpetua a quienes incurran en delitos de muy alta gravedad, entre ellos el abuso sexual a menores, o asesinatos a mansalva como los que están ocurriendo con mucha continuidad en estos tiempos.

Por supuesto que también se proponen importantes y hasta ahora inéditas reformas tributarias y laborales, la fiscalización permanente de los legisladores, la creación de tribunales populares y la emisión de una nueva moneda (¿saliéndonos o no de la dolarización?), entre otras ideas que se pondrán a consideración del pueblo ecuatoriano.