Editorial: Urgente depuración del SNAI
Las fugas en las cárceles del Ecuador continúan. Las investigaciones al SNAI deben dar resultados urgentes
Otra raya más al SNAI. Es inaudito que, en el contexto actual de violencia criminal que asfixia a Ecuador mediante extorsiones, robos, secuestros y asesinatos, al Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad (SNAI) se le sigan fugando los reos.
Desde su creación, el SNAI ha sido repetidamente señalado como el epicentro de la corrupción dentro de los centros penitenciarios del país. Las fugas de reos, casi siempre asociadas con la falta de control y supervisión, han debilitado la confianza de los ecuatorianos en la capacidad de esta institución para gestionar y reformar el sistema de justicia penal.
Cada administración que ha asumido el poder ha enfrentado la misma triste realidad: una estructura impregnada de malas prácticas y funcionarios corruptos que han logrado eludir las medidas correctivas. Las evasiones de reos y los escándalos asociados no son simplemente incidentes aislados, sino reflejos de una crisis estructural más profunda que ha puesto en evidencia las deficiencias del sistema penitenciario.
La solución a estos problemas requiere reformas profundas, un compromiso genuino con la transparencia y la rendición de cuentas, y una revisión exhaustiva de la administración y los procesos internos. Pero, ¿realmente le interesa al Estado depurar esta institución?