Palos de ciego

Fue dramática la despedida de Rafico el pasado 24 de Mayo, con lágrimas y una dolencia que lo mandó al hospital. Nunca los finales suelen ser felices, como en los cuentos de hadas.

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Pero no faltan quienes dicen que lo que sufre el Rafico es de “narcisitis aguda”. Y como luego de la ceremonia oficial en la Asamblea Nacional había el almuerzo en honor de los jefes de Estado visitantes, acto presidido ya por Lenín, él no soportaba ser el “número 2” o algo así, luego de haber sido amo y señor del país durante 10 largos años. Por eso prefirió abandonar el recinto en media sesión solemne, y se fue al hospital del IESS para tomarse un merecido descanso por su leve molestia pulmonar.

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Otros, en cambio, dicen que Rafico sí sufre de “bronquitis súper-aguda” y por eso ha estado en permanente “bronca” con lo que él llama la prensa corrupta, contra altos jefes militares, contra los “tira-piedras” y hasta contra jerarcas de la Iglesia a quienes acusó de “impertinentes”... ¿Semejante carácter belicoso sería, entonces, por su “bronquitis”?...

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Hoy termina el Mes de María que nos ofreció el cambio de mando y los últimos proyectos de ley que Rafico envió a la Asamblea entrante. Sobre todo el que se refiere a combatir y castigar el odio, la calumnia y las malas palabras en las redes sociales. No faltaron quienes miran a esa ley como algo también atentatorio contra la libertad de expresión. ¿Otra “mordaza”?...