¡Más precaución al manejar en la carretera!

CUANDO ESTAMOS YA en pleno feriado de carnaval, es tema obligado el creciente problema del tráfico de vehículos hacia los más atractivos lugares para vacacionar, especialmente la carretera Guayaquil-Salinas, que se vuelve cada día más importante y complicada por tantos balnearios que han surgido últimamente, además de que miles de guayaquileños y jubilados extranjeros los han escogido para residir allá sus últimos años, y vienen a la ciudad de vez en cuando, es decir todo lo contrario de lo que ocurría hasta hace algunos años. Además, los dueños de vehículos se han multiplicado en los últimos tiempos y, con toda razón, aprovechan para ausentarse “a la playa” con la mayor frecuencia posible.

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NO ES DEMÁS insistir en la necesidad de revisar oportunamente nuestros carros. Hay que respetar las leyes para evitar accidentes, con mayor razón en estos días de lluvias, pues el pavimento se vuelve peligrosamente resbaladizo, y un frenazo mal aplicado hace patinar el carro. El riesgo de chocar o salirse a la cuneta es muy frecuente, sobre todo si vamos apurados. La velocidad máxima permitida es de 100 km por hora, y para eso están los radares que chequean a todo carro que pasa. Pero ya se multiplican los “avispados” que compran unos aparatos que anuncian la inminencia del radar, y entonces el conductor baja la velocidad.

Pero luego de pasar el control, no tienen empacho en acelerar a 130 km o más aún, arriesgando su propia vida y la de los demás. ¿Habrá cómo evitar a esos “burladores”?...