Para el año que está por iniciar, además de trabajar en los cambios de la política económica y comercial interna, el gobierno deberá centrar sus esfuerzos en desarrollar un programa de reactivación y crecimiento para el sector exportador, toda vez que una economía dolarizada como la nuestra requiere el ingreso de divisas para dinamizarse, y el endeudamiento no puede seguir siendo una opción. Hay que ingresar al país capital que se pueda invertir y coadyuve al buen desempeño de las cadenas productivas.

El sector exportador se ve beneficiado cuando sus productos (tradicionales y no tradicionales) son recibidos pagando bajos o cero aranceles, de esta manera los mismos pueden competir por precio en los mercados extranjeros y siendo Estados Unidos el principal comprador, según datos de Proecuador el 21,72% de las exportaciones totales va a este destino, urge concretar la renovación del programa arancelario más significativo, el Sistema General de Preferencias (SGP), que está por vencer este 31 de diciembre, y de no darse en los primeros meses del año, implementar medidas casa adentro que no mermen el desarrollo productivo ni desamparen a este sector de la economía.

Más de 300 productos, entre ellos flores, madera, frutas, etc., se benefician de este programa. Los exportadores estiman que las pérdidas tras la no renovación serán de al menos 269 millones de dólares entre 2018 y 2020.

Pese a las gestiones, no existe una respuesta clara de EE.UU. y al igual que Ecuador, otros 120 países se verían afectados.

Estimados lectores, confiemos en que el 2018 vendrá cargado de cosas positivas para nuestro país, propongámonos trabajar con mayor ahínco y esfuerzo para hacer a esta nación más grande.

¡Feliz, próspero y bendecido año nuevo!