Opinión
Venezuela se desangra
Todos los ojos del mundo están puestos en uno de los más ricos países del mundo, por sus grandes reservas petroleras y mineras, que los latinoamericanos bautizaron como Patria de los Libertadores. A pesar de su catastrófica situación económica, con la permanente escasez de alimentos y medicinas, con la inflación más alta del mundo, la migración de los venezolanos ante la suma de necesidades y la inseguridad permanente, el gobierno chavista, pomposamente denominado Bolivariano, dirigido por Nicolás Maduro, intenta imponer al pueblo una nueva Constitución mediante la cual lo confirme en el poder que, además, está militarizado con unas Fuerzas Armadas y una Policía que diariamente enfrentan al pueblo opositor, que sale a reclamar a las calles, dejando un trágico saldo de más de cien muertos en menos de 3 meses.
Lo ocurrido recién con unas elecciones espúreas, ya que no contaron con la mayoría del pueblo y a las que la reglamentaron para que un porcentaje de votantes sean fieles seguidores del régimen, preocupa y conmociona a los pueblos del mundo. Con la nueva y corta prisión de López y Ledezma, esta situación obliga a una actitud más firme de órganos internacionales y de los países que, sin injerencia alguna, deben asumir una firme posición.