En plena jornada de la consulta popular y Referéndum 2025, el exalcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, hizo pública su postura sobre uno de los temas más sensibles del proceso: la Asamblea Constituyente. El líder político confirmó que votó SÍ en la pregunta relativa a la constituyente, y explicó que, aunque prefiere una vía “directa y sin intermediarios”, considera que el país no puede desperdiciar ninguna oportunidad para obtener una Constitución que funcione y asegure el futuro de los ecuatorianos.

“Como lo había dicho, voté sí también en la pregunta relativa a la Constituyente, porque aunque prefiero una vía directa y sin intermediarios, el pueblo no puede desperdiciar ninguna oportunidad para lograr una Constitución que garantice su futuro y haga que el Ecuador funcione”, señaló Nebot.

Su pronunciamiento se suma al intenso debate alrededor de esta pregunta, mientras el país espera los resultados oficiales del CNE, que empezarán a difundirse desde las 18:30 solo a través de la web y la app institucional, sin encuestas a boca de urna ni exit poll.

Nebot: “La misión del Estado es servir, especialmente a los que menos tienen”

En su mensaje, Nebot insistió en que una nueva Constitución debe ordenar las prioridades del Estado y colocar en primer lugar la seguridad, la salud, la educación, las obras y los servicios básicos por encima de cualquier otro gasto, incluso del pago de la deuda pública.

“El dinero tiene que destinarse primero a la gente”, fue el espíritu de su declaración, al remarcar que la misión de un Estado es servir y, en especial, proteger a quienes menos tienen.

El exalcalde ligó la necesidad de una nueva Carta Magna con un modelo que permita al Ecuador funcionar: instituciones claras, prioridades presupuestarias definidas y un marco que dé estabilidad para la inversión y el empleo.

Arbitraje internacional, trabajo por horas e inversión privada

Nebot también se refirió a temas económicos y laborales que han estado en el centro de la campaña por el referéndum. Sostuvo que el país requiere arbitraje internacional, trabajo por horas y condiciones de confianza para atraer tanto inversión nacional como extranjera.

Según su planteamiento, solo así se podrá garantizar crecimiento y empleo, siempre en el marco de un Estado que permita al sector privado competir en todas las áreas. De esta forma, alineó su apoyo a la Constituyente con una visión de apertura económica y reglas de juego claras para el sector productivo.

“El dinero del IESS no puede ser caja chica de ningún gobierno”

Uno de los puntos más duros de su mensaje fue dirigido a la seguridad social. Nebot recalcó que los fondos de los afiliados no pueden seguir siendo la caja chica de los gobiernos de turno y pidió blindar esos recursos en la nueva Constitución.

Extensivo a eso, también defendió los recursos que, por ley, corresponden a alcaldes y prefectos, es decir, a las ciudades y provincias. Señaló que esos dineros tampoco pueden ser “arbitrariamente utilizados por gobierno alguno” y pidió sanciones con destitución para las autoridades que violen esta disposición.

Presupuestos, promesas y sanciones

Nebot fue más allá y planteó que las autoridades que están obligadas a elaborar un presupuesto deben utilizarlo para cumplir sus promesas de campaña. Según su criterio, el dinero público debe dedicarse prioritariamente a los compromisos asumidos con la ciudadanía y ejecutarse al menos en un 90 %.

En su visión, una nueva Constitución debería establecer mecanismos que obliguen a esa disciplina fiscal y de gestión, y sancionar a quienes no respeten la prioridad del gasto social y de inversión en servicios.

“Después de 20 intentos fallidos, esperemos que esta vez se logre”

El exalcalde cerró su declaración con una mirada al pasado y un llamado al futuro. Recordó que el país ha tenido alrededor de 20 intentos fallidos en materia constitucional y expresó su expectativa de que, si el pueblo así lo decide en las urnas, esta vez sí se pueda alcanzar una Constitución que garantice prosperidad en democracia.

También hizo énfasis en que no basta con aprobar una nueva Carta Magna: los presidentes que lleguen al poder deberán cumplirla y hacerla cumplir.

Su postura marca una diferencia con otras voces políticas que han llamado a votar NO a la Constituyente, y se suma al mosaico de posiciones que han atravesado la jornada, desde adultos mayores que votan pensando en sus pensiones hasta jóvenes preocupados por el trabajo por horas y la inseguridad.

Esta declaración de Nebot se convierte en uno de los mensajes políticos más destacados del día, mientras Ecuador espera que el CNE empiece a revelar, en tiempo real, cómo se inclina el país frente a la propuesta de una nueva Constitución.

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