La situación negativa por la pandemia del COVID-19 no impide que personas y organizaciones destinen parte de sus recursos para compartir un momento de alegría en estas festividades navideñas.

La fundación Corazón Solidario se puso como meta regalar juguetes y golosinas a unos 55.000 pequeños habitantes de 800 sectores de Durán.

“Con la bendición de Dios; más el apoyo de la empresa y el municipio hemos logrado llevar regalitos hasta para chiquillos de la isla Santay y recintos”, expresó Lisette Burbano, principal de la organización, quien informó que la jornada finalizará el 6 de enero.

Como medida de bioseguridad, los paquetes de obsequios son entregados a los dirigentes barriales para que a su vez los entreguen a cada familia.

Mientras líderes barriales del suburbio de Guayaquil se unieron para compartir con padres y niños que por la crisis no iban a tener un regalo.

“Es un pequeño presente, pero lo damos con mucho cariño, confiados que saldremos de esta crisis sanitaria”, señaló Jorge Chamba, mientras dirigía el evento que se desarrolló en las calles F y la 24.

En la 26 y Chamber, docentes de la facultad de Ciencias Médicas de la Universidad de Guayaquil festejaron a un centenar de chiquillos del suburbio.

“Con crisis o no, siempre compartimos con los que menos tienen, debemos ser solidarios”, indicó el galeno Ecuador Montenegro.

En tanto que uno de los parterres de la ciudadela Los Esteros, en el sur de la ciudad, acogió a 100 padres de familia de escasos recursos, quienes recibieron canastas navideñas.

Gelacio Mora, representante del Tejido Social, comentó que esta jornada la realizan desde hace tres décadas.

En Samborondón

Mientras la celebración en Samborondón se anticipó a la celebración de la Navidad con un ciclopaseo.

Alrededor de 500 personas cogieron su ‘bici’ para pedalear 5 kilómetros.

“Además de fomentar el respeto al ciclista, la finalidad es compartir un momento familiar, más aún en esta época que ha sido complicado para todos”, manifestó el alcalde Juan José Yúnez.