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“Mientras me miraba, se masturbaba”
El individuo habría pedido perdón a la víctima para que no lo denunciara. Sin embargo, la afectada no cedió y acudió a la Fiscalía de Flagrancia para contar lo que vivió.
El sospechoso fue trasladado a la Unidad de Flagrancia, la mañana de ayer, en Guayaquil.
Esperaba un bus para ir al trabajo cuando Édison Montenegro se le acercó y supuestamente empezó a acosarla sexualmente. María (nombre ficticio) corrió a pedir ayuda y consiguió que fuera detenido, la mañana del 19 de mayo, en un puente peatonal del kilómetro 10 de la vía Guayaquil-Santa Elena.
El hecho se suscitó a las 08:45. La víctima, de 23 años, contó que el individuo empezó a llamarla con silbidos y luego le decía: “ven, ven, vamos abajo”, según consta en la denuncia que asentó en la Unidad de Flagrancia.
En esa dependencia, la afectada relató a EXTRA que el sospechoso le mostraba sus partes íntimas y la perseguía. Por eso, se apresuró hacia dos agentes de la Comisión de Tránsito del Ecuador (CTE) que estaban a pocos metros del paso peatonal.
En consecuencia, los uniformados detuvieron al sujeto y solicitaron apoyo de la Policía Nacional. Y mientras esperaban la llegada de los agentes, el aprehendido “les dijo que lo soltaran, que podían arreglar, pero los vigilantes le dijeron que no lo dejarían ir. Por eso, yo también vine a poner mi denuncia, porque quién sabe cuántas víctimas no lo habrán denunciado”, sostuvo María.
El cabo Carlos Moreira, del Grupo de Operaciones Motorizadas (GOM), del distrito policial Los Ceibos, agarró al presunto acosador y lo trasladó a la Fiscalía de Flagrancia. “El sospechoso pidió perdón a la víctima. Dijo que estaba arrepentido, que había cometido un error, pero eso lo resolverán las autoridades. No obstante, la joven decidió denunciarlo”, detalló el uniformado.
En la dependencia judicial, el caso fue tomado como un presunto acoso sexual. En el artículo 166, del Código Orgánico Integral Penal (COIP), ese delito es sancionado con prisión de uno a tres años.
(SCM)
Fue agarrado por agentes de la CTE
En la Unidad de Flagrancia, el sospechoso fue identificado como Édison Montenegro, de 40 años. El sujeto no dio declaraciones y fue ingresado al área de detención provisional.
En el escrito entregado en la Fiscalía, la víctima hace constar que el sospechoso vestía calentador y que tras sacar sus genitales “se las cogía con la mano y mientras me miraba se masturbaba”.
En el documento también se cita que el sujeto habría tratado de escapar, pero los agentes de la CTE lo alcanzaron. La víctima no recordaba los nombres de los uniformados que la ayudaron. Se retiraron tras apoyarla, comentó.