La comunidad educativa de un colegio ubicado en el sector del Itchimbía, junto a la central de emergencia ECU 911, en el centro de la capital, continúa consternada tras la viralización de un video en el que se puede apreciar cómo una estudiante golpea brutalmente a otra. La arrastra por el piso, le da puñetes y patadas, le jalonea el cabello. 

Esto ocurrió en presencia de otros estudiantes, quienes no intervinieron en la agresión para separar a las alumnas. De hecho, muchos de ellos solo se dedicaron a grabar con sus celulares y esto también generó indignación en la ciudadanía en general. El hecho se registró la tarde del viernes 20 de junio del 2025 pero se volvió viral cuatro días después tras la divulgación del mismo en redes sociales. 

Ese mismo día, la Subsecretaría de Educación de Quito informó que se tomaron algunas acciones luego de activar las Rutas y Protocolos de Actuación establecidos en este tipo de casos. Con respecto a la presunta agresora, las autoridades señalaron que ella actualmente se encuentra recibiendo clases en modalidad no presencial. 

EXTRA recibió información de que esta medida no se estaría cumpliendo porque la menor de edad no estaría recibiendo clases desde la fecha en la que ocurrió el incidente. Y esto preocupa al círculo familiar de la estudiante porque no saben cómo concluirá el año lectivo, en vista de que en el colegio se encuentran cursando las dos últimas semanas de clases y estos días rinden los exámenes finales para pasar de año. 

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Estudiantes cercanos a la familia de la menor comentaron que ella y su familia han recibido varias amenazas mediante llamadas y mensajes de números desconocidos. Por esta razón, la madre  acudió a la Fiscalía de Pichincha, el miércoles 26 de junio junto con las capturas de pantalla de los contactos de donde recibe las intimidaciones. 

¿Qué han hecho las autoridades?

Como parte de las otras medidas que dispuso el Ministerio de Educación estaban reuniones con los padres y madres de familia de las estudiantes afectadas; y el acompañamiento y contención emocional brindada tanto a las alumnas como a sus familias. Sin embargo, esto tampoco se estaría cumpliendo. La familia de la chica supuestamente no ha tenido ningún tipo de acercamiento. 

Por lo pronto, el incidente también está siendo monitoreado por el Departamento de Consejería Estudiantil Distrital y la Junta Distrital de Resolución de Conflictos, quienes determinarán la aplicación de las acciones educativas disciplinarias correspondientes, conforme a lo establecido en la normativa legal vigente para casos de violencia o acoso escolar.

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