Con lo inseguro que se ha vuelto el país, los pillos, al parecer, quieren autosuperar sus alcances cada día. En Guayaquil, ni los bomberos se salvan de la mano criminal. El reciente robo que sufrieron en Nueva Prosperina dejó en evidencia que también son un objetivo para los delincuentes.

Martín Cucalón, jefe del Cuerpo de Bomberos de la urbe porteña, expuso a los medios de comunicación cuáles son las dificultades y perjuicios que están pasando por culpa del hampa. Una realidad que esperan que cambie pronto.

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“Nos cierran los carros, nos obligan a dejar el agua, se suben al camión y lo revisan, te roban también afuera del cuartel”, detalló.

En sus revelaciones también expuso que cuando acuden a un sector para sofocar un incendio, en ocasiones les han impedido cumplir su principal labor. Sujetos armados los obligan a retirarse y no permiten apagar el fuego.

“Aparecen con pistolas, con fusiles, detienen a los bomberos y les dicen que por favor se retiren, que la casa tiene que terminar de quemarse”, contó.

Otra de las acciones en contra de ellos es que en zonas de alta peligrosidad, a veces no los dejan trasladar en las ambulancias a los heridos de bala hacia hospitales. “Te paran la ambulancia, te bajan al herido”, dijo Cucalón.

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Esa compleja situación ha provocado que el personal tenga disposiciones de qué hacer ante esos casos. Y la medida adoptada es que “ninguno ponga resistencia”, pues no se pueden exponer.

Dos bomberos voluntarios comentaron que también, a modo de precaución, cuando se trata de personas heridas por armas de fuego en sitios conflictivos, procuran acudir al auxilio cuando los policías ya se encuentran en el lugar.

“Si no llegan los policías, no se avanza”, reveló una de ellas sobre esta realidad. Por eso, la institución pide que los dejen laborar.

El robo en el sector de Nueva Prosperina ocurrió en la cooperativa Reinaldo Quiñónez, el pasado martes. Personal bomberil acudió hasta ese punto para atender un reporte de quema de maleza, pero cuando los vehículos de la institución se retiraban, pillos interceptaron una de las unidades y asaltaron a los bomberos.

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“Varios sujetos en moto los acorralaron y les robaron los celulares”, dijo Cucalón sobre lo sucedido. La entidad, en un comunicado, rechazó y repudió este tipo de actos delictivos contra sus colaboradores.

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