Actualidad
Persiste incertidumbre en comerciantes de Milagro
Vendedores planean acogerse al derecho de la resistencia. No se moverán hasta que el Municipio cumpla con varias de sus peticiones. El Cabildo les da plazo a salir hasta el 31 de este mes.
Al menos 250 comerciantes se resisten a salir de la bahía. El municipio les ha dado plazo hasta el 31 de enero para que se retiren.
Tienen más preguntas que respuestas. Aunque no son todos, al menos 250 comerciantes -de un total de 700- de la Bahía Mi Lindo Milagro, se muestran preocupados ante el inminente traslado al que deben acogerse por orden del Cabildo.
La reubicación responde a la construcción de la nueva Bahía Popular que el Municipio pretende efectivizar en seis meses, aproximadamente, en el mismo lugar donde los comerciantes hoy ejercen sus labores, junto al actual Terminal Terrestre.
El 31 de enero es la fecha tope para que ellos desocupen sus actuales cubículos metálicos y se reinstalen en las orillas del río, en el malecón Esmeraldas.
Ramiro Hidalgo es uno de los 250 comerciantes de la Bahía que ha pensado resistirse a salir porque para él y sus compañeros, todavía “no existen las debidas garantías”.
Hidalgo aduce que la obra que el municipio pretende realizar no estaría todavía adjudicada a ninguna empresa, además ninguna autoridad les ha asegurado que regresarán a las nuevas instalaciones una vez que, en el mejor de los casos, la obra se culmine en los tiempos establecidos.
“Que quede bien claro, si no hay la seguridad ni existe el contrato vamos a acogernos a nuestro derecho a la resistencia. Esto es en beneficio para todos incluso para los compañeros que están en oposición (a nosotros)”, añadió el comerciante, quien indica que en ausencia de un ofertante nadie les garantiza que la obra se vaya a ejecutar.
Mediante un boletín de prensa del 17 de enero, el Municipio informó que la obra inicia en febrero próximo, pero sin especificar fecha exacta ni nombre de la empresa que se haría cargo de los trabajos.
En el comunicado se explica también que en el lugar donde deben trasladarse los vendedores se desarrollan trabajos de limpieza, delimitación de puestos; además, habrá resguardo policial y presencia de la Comisión de Tránsito del Ecuador, reflectores, baterías sanitarias móviles, servicio de recolección de basura y fumigación.