La alegría y el colorido del carnaval se vieron opacados por el luto y el dolor en el cantón Quinindé, provincia de Esmeraldas, donde una familia sufrió la pérdida de uno de sus integrantes en un fatal incidente, la tarde del martes 13 de febrero de 2024. 

Un hombre identificado como Nelson, de 33 años, murió ahogado en una piscina de un complejo turístico al que había acudido junto a sus seres queridos, para celebrar el último día de la fiesta popular. 

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La víctima, quien se desempeñaba como contador en una empresa local, decidió lanzarse de un tobogán y esa fue la última vez que sus allegados lo vieron con vida, porque al llegar al agua no emergió.

Quienes se encontraban en el sitio se lanzaron de inmediato a buscarlo, pero fue tarde. El hombre ya no tenía signos vitales. El coronel David Benítez, jefe local de la Policía, señaló que Nelson estaba aparentemente alcoholizado y que posiblemente se dio un golpe al caer a la piscina.

El sitio donde ocurrió el accidente emitió un comunicado lamentando el hecho y asegurando que cumple con todas las medidas de seguridad y prevención para garantizar el bienestar de sus visitantes. Sin embargo, anunció que suspendería sus actividades hasta nuevo aviso, mientras se realizan las investigaciones pertinentes.

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