¡Se hizo prueba de ADN y descubrió un terrible secreto!

Kelli Rowlette, de 36 años, está demandando a un doctor de fertilidad tras descubrir que este utilizó su propia esperma para embarazar a su madre.

La mujer estadounidense utilizó una prueba de ADN del sitio web Ancestry.com para aprender sobre su herencia genética. Cuando recibió los resultados, pensó que estaban equivocados, pues no la conectaban con su padre, sino con un hombre en Idaho que ella no conocía.

Cuando les comentó a sus padres acerca de los resultados, ellos reconocieron al hombre. Se trataba de Gerald E. Mortimer, un doctor de fertilidad al que habían acudido cuando tenían problemas para concebir. Según The Daily Mail, Rowlette luego descubriría que Mortimer aparentemente utilizó su propio semen para embarazar a su madre sin su conocimiento o consentimiento.

En los años 80, el doctor les recomendó a los padres de Rowlette mezclar el esperma del padre con el de otros donantes para incrementar las probabilidades de embarazo. Ellos aceptaron y eligieron como donantes a hombres jóvenes que cursaban estudios universitarios. El doctor Mortimer entonces realizó el procedimiento, pero usando su propia esperma y sin decirle a los futuros padres.

Mortimer, ahora retirado, nunca reveló el secreto. Ahora está siendo demandado por su hija biológica, que lo acusa de negligencia médica, fraude, daños emocionales e incumplimiento de contrato.