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Los sujetos en moto arrojaron la granada y huyeron por la calle Logroño, norte de Quito.Miguel Ángel González y captura de video

¿Qué hay detrás de la explosión en un night club de Quito? Esto se sabe

Un centro de diversión nocturna fue blanco de dos ataques en ocho días. En el último, los criminales hicieron detonar una granada de uso militar

Los ataques para intimidar a los dueños de negocios han subido drásticamente de tono en Quito. Y el hecho más reciente así lo demuestra: un night club fue blanco de la detonación de una granada tipo piña y de uso militar.

El hecho se registró pasadas las 21:00 de este 19 de junio cuando dos hombres a bordo de una motocicleta arrojaron el arma afuera del sitio, ubicado en la calle Logroño, cerca de la avenida De La Prensa, norte de Quito. Lo más preocupante fue que a los criminales no les importó la presencia de transeúntes en esa zona de La Concepción.

Según el Cuerpo de Bomberos de Quito, siete personas resultaron heridas producto de las esquirlas que se alojaron en sus cuerpos. Debido a la gravedad, dos de ellas fueron llevadas a hospitales y su condición se mantiene en reserva.

Por fortuna, el resto de afectados no tuvo mayores complicaciones, a decir de Christian Proaño, comandante subrogante del Distrito policial Eugenio Espejo. Según el oficial, se presume que el ataque sería por un tema de extorsión.

(Vea más detalles en el siguiente tema | Explosión en Quito: Este es el video que captó el momento del ataque en cabaret)

Si bien los dueños o empleados no han recibido amenazas directas, el modo de operar apunta a este tipo de intención criminal. El teniente coronel Proaño detalló a EXTRA que el 11 de junio ya hubo un caso similar en el mismo negocio.

Asimismo, dos sujetos en moto llegaron y arrojaron también una granada tipo piña. Solo que en esa ocasión no explotó, según el oficial. Unidades especiales antiexplosivos detonaron el arma de una forma controlada, explicó Proaño.

El nivel de inseguridad antes de la explosión

Las esquirlas dejaron daños en diversos sitios en el cabaret atacado, en el norte de Quito.Miguel Ángel González

A más de las personas afectadas, los bomberos detallaron que la onda expansiva dañó a dos vehículos que circulaban por el punto. La huella quedó en el piso: se veía vidrios rotos de los automotores.

Además, las esquirlas también se alojaron en paredes y puertas del centro de diversión nocturna. Por ahora, las diligencias investigativas no han dado resultados para conocer qué grupo armado está detrás de lo ocurrido.

La gente que reside en el área estaba preocupada porque la violencia ha tenido un incremento en aquel sector. Los habitantes recordaron que a solo 900 metros de distancia de la calle Logroño hubo un ataque armado que dejó dos hombres asesinados.

El hecho se dio la madrugada del 5 de junio cuando llegó una camioneta y se estacionó cerca de una hostal. Una mujer se bajó, llamó por teléfono y al poco tiempo arribaron dos hombres a bordo de otro vehículo.

Los ocupantes de la camioneta se les acercaron y uno de ellos disparó hasta matar a ambas víctimas. La mujer tomó fotografías de los cuerpos, se embarcó en la camioneta y huyó con los demás.

Por ahora, la Policía no ha hecho públicas las motivaciones que originaron ese ataque armado. Tampoco las identidades de ambos sujetos que murieron baleados con, al menos, siete tiros.

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