Una noche larga y llena de susto e incertidumbre, vivieron los gironenses debido a inundaciones y deslizamientos que se registraron en el centro de este cantón del Azuay, ubicado a 45 kilómetros de Cuenca. 

Con lampas, escobas, baldes y lavacaras, evacuaron el lodo y agua que ingresó en al menos treinta viviendas, de las cuales, cuatro resultaron seriamente afectadas, según el dato proporcionado por el alcalde José Miguel Uzhca. Que hay cuatro familias evacuadas, de cinco miembros cada una, aseguró Uzcha

Todo comenzó a eso de las 20:40 del lunes 7 de marzo, luego de una fuerte lluvia que cayó por unas cinco horas en la zona sur del Azuay, las llamadas de emergencia fueron incrementándose por la presencia de material arrastrado por las quebradas y que bloquearon algunas calles, barrios y los alrededores del centro cantonal, dijo la mañana de este martes el alcalde de Girón.

La atención de la emergencia contó con participación de bomberos y maquinaria contratada para los trabajos de limpieza, agregó la autoridad tras destacar que las familias afectadas serán atendidas por el departamento social del ayuntamiento.

Las clases se suspendieron, mientras se ha solicitado a la ciudadanía realizar un consumo moderado y necesario del agua potable, ya que por las lluvias el proceso de potabilización se encuentra intermitente.

Se ha alertado también a la empresa eléctrica de varios postes que se encuentran en riesgo de colapsar y que podrían dejar sin servicio eléctrico al sector de la Gloria y posiblemente al centro cantonal.

A ello se suma la interrupción de la carretera Cuenca-Girón-Pasaje por un derrumbe de gran magnitud, en el kilómetro 33, concluyó José Miguel Uzhca indicando que los problemas también se presentan en la red vial secundaria que conecta con las comunidades del cantón azuayo.