Tras tremenda mentira, momentos de angustia le hizo vivir una mujer a su cónyuge. El pasado 9 de marzo desapareció de su hogar, horas después el padre de su hijo recibió mensajes y llamadas a WhatsApp donde le pedían 2.000 dólares a cambio de devolver a su amada con vida.

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Sin embargo, tras varias pericias de agentes de la Unidad Antisecuestro y Extorsión (Unase) de la Policía, luego de que el caso fuera denunciado en la Fiscalía, se corroboró que todo se trataba de un engaño y que María, de 29 años, había estado disfrutando en compañía de su nueva pareja.

Una fuente de la Unase reveló que la fémina fue encontrada la noche del viernes en una discoteca en el sur de Guayaquil, junto a Aaron Alvarado, con quien, al parecer, mantenía una relación extramatrimonial y que, además, era su cómplice en el delito de extorsión por el cual fueron procesados, tanto ella como su ‘novio’, luego de ser detenidos por los policías.

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“Desde que fingió su secuestro anduvo con este hombre. Estuvieron en varios hoteles y en otros sitios divirtiéndose, mientras que el marido estaba preocupado, pensando que realmente había sido secuestrada. Todo se trató de una mentira. Cuando llegamos adoptaron una actitud evasiva e incluso dieron nombres falsos”, indicó el investigador.

Tres días después del aparente plagio, el hombre canceló 150 dólares para que los supuestos delincuentes no le hagan daño a su pareja.

El general Víctor Herrera, comandante de la Zona 8, informó que el supuesto delito se trató de una simulación hecha por la mujer y su acompañante y corroboró la versión dada por la fuente de la Unase. “La cónyuge era la que supuestamente estaba secuestrada. Afirmó que se dirigía a una cita odontológica, en el norte de la ciudad, cuando se la llevaron”, sostuvo el comandante de la Zona 8.

La extorsión está tipificada en el artículo 185 del Código Orgánico Integral Penal (COIP) la pena por el mismo es de 3 a 5 años de prisión. En la página de la Función Judicial además consta que tres días después de la audiencia de formulación de cargo, por este delito, el hombre engañado le puso una demanda de alimentos. (AEB)

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