El asesino del militar en servicio pasivo Luis Guillermo Medina Benítez, quien era dueño de un taller de reparación y pintura de vehículos, cubría su rostro con una mascarilla y aprovechó que la puerta estaba abierta para entrar y dispararle.

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Medina, de 62 años, fue asesinado la mañana de ayer dentro de su negocio, ubicado en las calles García Moreno entre Alejo Lascano y Manuel Galecio. Estaba sentado en una silla cuando le propinaron dos tiros.

Una persona cercana a la víctima reveló que el asesino le pidió el celular y que la víctima se lo entregó, pero aun así el delincuente le propinó los disparos y luego huyó en una motocicleta donde lo esperaba su compinche.

De acuerdo a datos proporcionados por una persona cercana al ahora fallecido, hace 9 meses lo habían contactado por teléfono para pedirle una suma de dinero a cambio de no atentar contra su vida.

“Decían que eran Choneros, le pedían cierta cantidad de dinero, nunca les dio importancia, podría ser una de las causas”, sostuvo. (AEB)

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