“No es un robo. Esto es una retaliación que surge a raíz de la muerte de Rasquiña. Las unidades especializadas ya tienen identificados a los dos sujetos responsables de este hecho, gracias a las cámaras de seguridad de los alrededores”, informó el jefe subrogante del distrito policial del cantón Milagro, Marcos Rodríguez, sobre la muerte de Ángel Murillo Sánchez, de 42 años, ocurrida la tarde del primer sábado del nuevo año.

Murillo Sánchez estaba en una moto en compañía de Ana Elizabeth Freire León, de 18 años, estacionado en la calle Portugal y Rocafuerte, populoso sector, al norte del cantón guayasense, cuando fue sorprendido por dos individuos que también andaban en motocicleta.

A Murillo le propinaron tres balazos, uno de ellos en la cabeza, mientras que la mujer intentó escapar pero fue alcanzada a unos quince metros y le dieron dos balazos, uno en la pierna y el otro en la cadera.

Una ambulancia del Cuerpo de Bomberos llegó y tras confirmar el deceso de Murillo, trasladó a la herida hasta el León Becerra en donde quedó con pronóstico reservado.

El asesinado cayó junto a la moto virada y en el vehículo los agentes hallaron un saco pequeño con un horno microondas en cuyo interior había fundas con prendas de vestir.

Personal de las unidades especializadas de la Policía halló 8 indicios balísticos y, además, en poder de la herida, había varios sobres con una sustancia blanquecina. Las autoridades indicaron que la joven sería una consumidora de droga.

En el cantón Milagro, una de las cuatro localidades de la provincia Guayas intervenidas (las otras son Naranjal, Daule y El Empalme), se registraron cuatro muertes violentas en diciembre pasado. (ML)