Jubilados, pacientes y organizaciones sociales denuncian corrupción en el IESS, especialmente en las derivaciones a clínicas privadas, donde entre 2013 y 2025 se gastaron miles de millones de dólares sin auditorías claras. Reclaman mayor participación ciudadana en el Consejo Directivo, inversión en hospitales propios y contratación de especialistas. 

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Jubilados en pie de lucha

Edison Lima, de 87 años, continúa con su activismo en defensa del IESS., ha participado en plantones y debates en la Asamblea, y sostiene que, aunque la derivación a clínicas privadas puede ser una opción, esta debe estar sujeta a estrictos controles. 

Su experiencia personal refleja la falta de eficiencia, tras meses de espera para una cirugía de próstata, fue derivado a distintas clínicas que, hasta el día de hoy no ha recibido una solución definitiva ante su problema.

Problemática sin resolver

Lima asegura que la corrupción se enquistó en el IESS desde la gestión de Ramiro González, cuando optó por favorecer a las clínicas privadas mediante contratos cuestionados, y no velar por la salud de los afiliados. 

Afirma que, mientras el Seguro Social esté controlado por el Gobierno de turno y no por los asegurados, la situación no cambiará y siempre se verá en vuelta en actos de corrupción.

Rechazo a la exclusión ciudadana 

El activista critica que el Gobierno haya bloqueado la reforma a la Ley de Seguridad Social, una propuesta ciudadana que buscaba mayor participación de jubilados y afiliados en el Consejo Directivo.

Por ello, colectivos de pensionistas se preparan para movilizaciones y protestas ante la carencia de soluciones planteadas por el IESS; además se prevé una reunión nacional de jubilados convocada en Guayaquil el 23 de agosto de 2025.

Reclamos de los ciudadanos 

El dirigente Jorge Escala, de Unidad Popular, señala que entre 2013 y 2025 el IESS gastó 8.000 millones de dólares en clínicas privadas, cuando esos recursos pudieron destinarse a hospitales, medicinas y especialistas. 

Denuncia que estos pagos carecen de auditorías rigurosas, lo que debilita el sistema, Escala advierte que pedirá acciones a la Contraloría y Fiscalía, además de estudiar una demanda ante la Corte Constitucional.

Testimonios de los afectados

Bolívar Potes, maestro jubilado, relata que tras 40 años de trabajo esperaba una vejez tranquila, pero sufrió en reiteradas ocasiones estafas con préstamos fraudulentos que, usaban su identidad en la plataforma virtual del IESS. 

Señala que la falta de control no solo afecta la atención médica de los afiliados, sino también la seguridad de los pensionistas, que suelen encontrase envueltos en problemas que no saben que tienen, por poco o nulo control que la institución tiene.

Pacientes en riesgo

William Aulestia, presidente de la Asociación de Pacientes Trasplantados, advierte que con los miles de millones gastados en derivaciones se habrían podido construir hospitales y garantizar medicinas, denuncia la existencia de derivaciones ficticias y pide al Consejo Directivo acciones urgentes para recuperar los fondos perdidos.

Transparencia y control

Los testimonios de jubilados, pacientes y dirigentes sociales confluyen en una misma exigencia, que el IESS deje de ser una fuente de enriquecimiento indebido y se convierta nuevamente en un sistema sólido de seguridad social. 

La corrupción en las derivaciones a clínicas privadas, la falta de auditorías en los pagos millonarios y la exclusión de los asegurados en la toma de decisiones han deteriorado la confianza en la institución.

Los colectivos coinciden en que es urgente reducir progresivamente los convenios con clínicas privadas, fortalecer la red hospitalaria propia, contratar especialistas y garantizar la compra directa de medicamentos. 

También reclaman un cambio estructural en el Consejo Directivo para que los afiliados y jubilados tengan representación real y no dependan de la voluntad política del gobierno de turno, la consigna es clara, recuperar la salud pública del IESS y desalojar a las mafias que lucran con la enfermedad.

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