El olor de los patacones fritos llega a las viviendas aledañas al sitio donde Nelly Machoa ubica su negocio. Ningún vecino se queja. Al contrario, se asoman desde sus ventanas con ganas de probarlos.

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La mezcla de olores del plátano verde, los chicharrones y el café llama la atención de todos sus lugareños y los invita a probar un bocado de lo que preparan todas las mañanas.

En el corto espacio de la vereda de una residencia ubicada en la calle Bolivia, entre la 40 y la 41, al suroeste de Guayaquil, ella instala la cocina industrial y los diferentes implementos necesarios para “los mejores desayunos del sector”, sostiene Nelly, de 54 años.

El suyo no es un negocio improvisado, pues desde hace 10 años ha emprendido en el servicio de alimentación. “Empezó por necesidad, como muchos de los que inician su negocio. Pero, sobre todo, porque necesitaba una fuente de ingresos en la que no me sintiera dependiendo de una tercera persona”, comenta la mujer.

Sin embargo, a lo largo de los años el menú ha cambiado dependiendo de su clientela. Ella cuenta que hace poco tiempo atendía en un local en la calle Portete (a pocas cuadras de su nuevo punto de venta) y como parte de su menú ofrecía guatita y seco.

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“Decidí no vender más esos platos porque me moví y ya no tenían tanta ‘salida’ como el bolón o los patacones”, menciona. Entre sus fortalezas, Nelly destaca el moverse con la ‘corriente’, conforme han avanzado sus comensales. “Me tomo el tiempo de escucharlos y sé desde dónde caminan para comer. Entonces cada vez me voy acercando más”.

Ayuda para los platillos: Hay dos manos más

La comerciante, quien siempre está dispuesta a servir con amabilidad a sus clientes, ahora recibe la ayuda de Vicenta Pibaque, quien colabora con ella en la cocción para lograr el sabor que tanto les gusta a los clientes.

Entre las preparaciones más ‘pepa’ que ofrecen resalta la corvina frita con patacones, arroz y un poco de ensalada de aguacate. “Ese es el platillo que más vienen a pedirnos. Comen aquí porque está caliente y se siente más rico”, asegura Nelly.

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