En una ciudad tan peligrosa como Guayaquil ―o casi cualquier otra de Ecuador― ‘ni Superman, en su versión de Clark Kent’, estaría exento de un robo. ¿Te pasó con tus tarjetas bancarias...?

(Lee también: ¿Cómo ahorrar y no fracasar en el intento? Descubre la regla 50/30/20)

Si ya estás seguro, debes moverte de inmediato para evitar que el infortunio sea peor. Te damos algunos consejos en Sí te alcanza, con EXTRA.

Ante todo, asegúrate, lo más pronto posible, de que tus tarjetas hayan sido 'pateadas’ por otra persona. (No será que las termines encontrando debajo de algún asiento)

¿Definitivamente las perdiste? Primero: ‘tranqui’, mantén la calma. La preocupación puede nublar tu mente.

Ahora sí, 'pila y mosca’. De antemano, debes conocer los números de tu banco para emergencias. Puedes también ‘guglearlos’ fácilmente, como lo sugiere en su blog el banco español BBVA, una de las mayores entidades financieras del mundo.

Por lo general, al atender tu emergencia, el asesor bancario te hace preguntas de seguridad que debes responder con la mayor seguridad, precisión y claridad posible. El proceso dura pocos minutos y suelen sugerirte un bloqueo temporal, el cual puedes cambiar por una suspensión definitiva del plástico extraviado.

Considera también la posibilidad, según el banco, de "apagar" tu tarjeta cuando creas que no la utilizarás. Lo puedes hacer desde la aplicación móvil o sitio web. La enciendes luego, sin lío.

RENOVAR PLÁSTICO TIENE COSTO

No es que será ‘a vaca’. Reponer tus tarjetas tendrá un costo, el cual, a la fecha, es de aproximadamente $ 5 según la entidad financiera. Pregúntale esos detalles a tu asesor, por si no te los informa.

En resumen:

En pocos días, todo se habrá solucionado y solo habrá sido una mala experiencia que has podido manejar de la mejor manera, incluso en menos de cinco minutos.

Sigue a Sí te alcanza y lee sin límites en extra.ec: ¡suscríbete!