Mientras caminaba por la acera de las calles Juan Benigno Vela y Francisco Flor, un niño de cinco años murió y su padre de 55 quedó herido después de que fueran atropellados. Todo pasó a las 13:00 de ayer en el centro de Ambato, cantón de Tungurahua. Padre e hijo caminaban con dirección a su domicilio, que queda a pocos metros del sitio del accidente.

De repente la muerte los alcanzó en forma de un auto blanco, cuya conductora perdió el control, ya que se salió de la calle y se subió hasta la acera.

De acuerdo con los agentes de Tránsito municipales, la mujer que conducía estaba en estado etílico y lo verificaron con las pruebas de alcoholemia. El agente Jairo Castro informó que dentro del carro se hallaron botellas de licor.

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La indignación hizo que los transeúntes intentaran linchar a la mujer, de unos 26 años, pero los policías y agentes lograron rescatarla y trasladarla hasta la Unidad de Vigilancia Comunitaria (UVC).

A SU TIERRA

Amigos de la pequeña víctima llegaron hasta el sitio y no podían con tanto dolor. El auto aplastó al pequeño y pese a que los vecinos intentaron ayudar, no pudieron hacer nada. La salud del progenitor es crítica.

“Fue terrible lo que sucedió. Ellos caminaban por la acera y no pudieron escapar porque el auto se cruzó. El niño murió en el sitio”, expresó José Pérez, uno de los curiosos. Mencionaron que la mujer que conducía intentó escapar, pero fue retenida por la gente.

El hombre herido está en una casa de salud, mientras que su hijo fue llevado hasta el Centro Forense. Los afectados son extranjeros y los vecinos del centro empezaron a realizar colectas para ayudarlo. Mencionaron que los allegados van a llevar el cuerpo hasta Venezuela y sepultarlo en compañía del resto de familiares. 

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