Exclusivo
Actualidad

La adolescente abusada por su progenitor estaba muy afectada.Fotos: Valentina Encalada / EXTRA

¡Sindican al padre de ser el violador!

Agobiada por la pena, la madre se desmayó cuando denunciaba el hecho judicial en la Fiscalía, en el Albán Borja. La víctima es una adolescente de 15 años.

Por tres años seguidos, un padre supuestamente venía abusando de su propia hija de 15 años. Su madre recién se enteró el viernes pasado de esta agresión y el lunes 4 de junio acudió a la Fiscalía, para presentar la denuncia.

Para la señora, saber que su exmarido ofendió a su niña es como una terrible pesadilla que no puede olvidar, a tal extremo que se desmayó en la sala de espera del Ministerio Público, mientras aguardaba la valoración médica de la afectada.

Una tía de la adolescente dijo que su sobrina no vivía con su madre sino con ella y que la violación sucedió cuando esta tenía 12 años, pero nunca les contó lo que estaba pasando. “Ella solo se quedaba en silencio y lloraba, pero jamás dijo nada, hasta la semana pasada cuando nos reveló esto que para nosotros es muy terrible”, manifestó la allegada.

Además, indicó que su pariente se iba a pasar con su abuelita y allí habría ocurrido el abuso en Samborondón.

Según la tía, había notado un cambio en el carácter de su sobrina y eso hizo sospechar que algo malo pasaba con ella, pero era reservada, hasta que rompió ese silencio y allí se enteró de lo sucedido.

La afectada, sentada en una banca de la Fiscalía, apenas pudo decir que estudia en el noveno año de un colegio en Samborondón.

La mamá de la joven indicó que al papá no le gustaba cuando se enteraba de que ella tenía un enamorado y hacía que esa relación se rompa.

“Se los corría a los novios”, dijo la señora, mientras sostenía en su mano derecha unos documentos para la valoración médica de su hija. La adolescente no quería que un médico la revise, sino una doctora, pero a las 15:45, cuando estaban en la espera de cambio de turno de los médicos, la mamá de la jovencita se desplomó.

Una mujer policía comenzó a pedir ayuda para reanimar a la señora. Con la colaboración de tres hombres, la mujer fue colocada sobre unas sillas de la sala de espera. Con un poco de alcohol que le frotaron, diez minutos más tarde fue reanimada por sus parientes y una amiga que las acompañaba. Luego salieron, se embarcaron en un taxi y abandonaron el lugar. A las 16:10 llegó una ambulancia para brindarle los primeros auxilios, pero la señora ya no estaba.