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¡No iban al partido, sino a la frontera!

Tres personas caminaban juntas dentro del hospital de Cayambe, cantón del norte de Pichincha. Ayer, ellas ingresaron por la puerta principal con cierto recelo y conversaron con un guardia de seguridad.
Le preguntaron si en la morgue de la casa de salud todavía estaban los cuatro colombianos que murieron la tarde del miércoles, en el sector de Otón, luego de que su auto chocara con un autobús.
La respuesta del celador fue afirmativa. El sufrimiento descompuso el rostro de las dos mujeres que estaban en ese grupo. Las señoras no quisieron dar sus nombres, pero confirmaron ser las parientes de Juan Diego González, uno de los cuatro muertos.
Dos fueron identificados como Eduard Julián Imbacuán, de 30 años, y Alexander Valencia Pérez, de 40. El último no tenía documentos, por lo que se desconocía de quién se trataba.