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El nuevo Papa y la Iglesia Católica: entre festividades, retos y decisiones difíciles
Con un año jubilar de fondo, el nuevo Papa debe decidir el rumbo de la Iglesia en tiempos difíciles.
Con el inicio del Año Jubilar 2025 y la reciente elección de un nuevo pontífice, la Iglesia Católica se prepara para días de celebraciones y decisiones clave que marcarán el rumbo del mayor cuerpo cristiano del mundo en un contexto global complejo.
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Celebraciones y decisiones cruciales

El nombre del nuevo papa resonará en homilías y misas a lo largo del planeta, y será recibido con especial entusiasmo en su país de origen. Esta transición papal coincide con un calendario cargado de eventos religiosos, debido al jubileo proclamado hace 25 años por Juan Pablo II, que el Vaticano ha organizado con especial esmero.
Sin embargo, más allá de las festividades, el nuevo pontífice enfrenta una tarea difícil: liderar una institución global en tiempos de incertidumbre. Hereda una Iglesia transformada por su predecesor, el Papa Francisco, quien orientó el foco pastoral hacia los pobres, migrantes y marginados, y se distanció de los debates tradicionales sobre aborto, homosexualidad, anticoncepción y roles de género. Ahora, el nuevo líder deberá decidir si mantiene ese rumbo o adopta una línea más conservadora, como promueven ciertos sectores dentro de la Iglesia, particularmente en temas como sexualidad, familia y migración.
La diplomacia vaticana y las crisis internas
En el plano internacional, el nuevo Papa deberá definir su papel como actor diplomático en un contexto global complejo. Francisco asumió posiciones políticas en sus últimos años, defendiendo a los inmigrantes y buscando un alto el fuego en la guerra entre Israel y Hamas, entre otras iniciativas.
Además, las crisis internas siguen siendo una preocupación, especialmente el escándalo de abusos sexuales a menores dentro de la Iglesia. Aunque Francisco implementó reformas, organizaciones de víctimas lo acusan de no actuar con la suficiente firmeza contra los obispos y cardenales acusados de encubrimiento. El nuevo papa deberá afrontar este legado y tomar decisiones que afecten la credibilidad del Vaticano.
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