No puede hablar, tampoco comer. Permanece postrado en una cama y en estado de depresión. Así transcurren los días de Ítalo Sabino Cruz Matías. El pasado 18 de julio, al hombre de 40 años le cortaron la lengua con una tijera. Ahora para comunicarse con sus familiares lo hace por medio de señas, pues presenta dificultades para conversar.

Su hermana Fátima Cruz contó a EXTRA que el 17 de julio pasado, luego de terminada su jornada laboral, Ítalo acudió a la casa de unos compañeros de trabajo, con quienes se reunió para beber.

“Los conoce desde hace varios años. Han trabajado juntos. Ellos le insistieron para que vaya. Mi hermano nos cuenta que le dieron de comer y que bebieron licor, de un momento a otro perdió la conciencia. Dice que no recuerda nada, que cuando despertó solo sentía dolor”, explicó Fátima.

Karina Cruz, otra hermana, manifestó que la madrugada de aquel día los llamó un policía indicándole que Ítalo había tenido un problema en casa de unos amigos en la ciudadela Las Orquídeas y que fueran para que lo llevaran a casa.

“Al llegar, mi hermano tenía su ropa manchada con sangre, estaba inconsciente y tirado en el piso, cerca del baño. Nos dijeron que había tenido un problema, pero que ya había llegado una ambulancia y que lo habían revisado y cogido unos puntos en la boca”, recordó Karina.

Agregó que una de sus hermanas, quien entró al domicilio, alcanzó a ver que las paredes de la casa estaban manchadas con sangre.

“Me dijeron que mi hermano se había mordido la lengua, eso me pareció raro. Sin embargo lo llevamos a casa. Se quejaba de dolor y lo trasladamos a un hospital. Allí nos dimos cuenta que tenía la lengua cortada”, señaló Karina.

Explicó que asentaron en la Fiscalía una denuncia por lesiones en contra de dos amigos de su ñaño. En la valoración médica le dictaminaron 90 días de incapacidad física y que el corte fue provocado con una tijera. También tiene heridas en los dedos de sus manos y en otras partes del cuerpo.

“Los dizque amigos (sospechosos) le envían mensajes a mi hermano diciéndole ‘podemos hablar civilizadamente’ como que lo que hicieron no fue nada grave”, sostiene Fátima.

Teodomiro Cruz, tío y abogado de la víctima, dijo que no solo denunció a los dos ‘panas’, también presentó una acusación en contra de otras dos personas que estuvieron en ese domicilio.