“Lo tuve entre mis brazos y me decía llorando: ‘no me dejes morir’”, recordó con dolor Zami Balón a un compañero de clases herido por la explosión de un artefacto en el interior del aula 3 de la unidad educativa Víctor Emilio Icaza de Playas, la tarde del pasado jueves 1 de septiembre, y que dejó una estudiante muerta y 15 lesionados.

Balón, de 20 años y estudiante del programa de bachillerato acelerado, del Ministerio de Educación, aplicó sus conocimientos de enfermería para darle los primeros auxilios al alumno de dicho plantel.

Santos Bravo (19), también estudiante y testigo del hecho, contó a EXTRA que un alumno de nacionalidad colombiana y que supuestamente radica en la comuna Engabao, fue quien habría llevado cuatro ojivas (municiones de uso militar) y se las dio a sus compañeros, pero solo manipularon una de ellas. La detonación se produjo luego de que el artefacto se cayera desde uno de los pupitres donde fue colocado.

María José Campoverde (26), quien se encontraba cerca de los alumnos que tenían el proyectil ojival, murió al golpearse contra una de las paredes del salón de clases, debido el fuerte estallido, según Bravo.

Sin embargo, en un informe de la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida (Dinased) se señala que los sospechosos habrían dicho que el artefacto explosivo “lo habían encontrado cerca de la vía principal, en el sector denominado Engabao, en un polígono de práctica, de uso militar, abandonado”.

En un comunicado, el Ministerio del Interior señaló que se investiga a dos estudiantes de 17 y 16 años, quienes supuestamente estaban manipulando el objeto, cuya explosión pudo escucharse en un área de un kilómetro a la redonda.

Los involucrados en este hecho están asilados, desde la noche del jueves, en el hospital Abel Gilbert Pontón de Guayaquil, debido a la gravedad de su estado de salud. La audiencia de formulación de cargos contra los adolescentes estaba prevista para la tarde de hoy, viernes 2 de septiembre de 2016, en la casa de salud donde permanecen.

La alcaldesa de Playas, Miriam Lucas anunció que el Municipio entregará una plaza de trabajo a uno de los familiares de la víctima de la explosión, quien dejó a dos niños en la orfandad. También solicitó investigar la presunta presencia de artefactos explosivos que suelen ser abandonados en campos de entrenamiento militar cerca de Engabao, ya que no sería la primera vez que personas resultan afectadas por manipularlos.