SUSCRIBIRME POR $1/ 1 MES

Exclusivo
Actualidad

¡Tagadá, el juego maldito! La atracción mecánica dejó tres heridos en Guayaquil

Es el segundo accidente que ocurre en un parque de diversiones del país en menos de una semana. En Quito, los padres de los menores que ‘volaron’ del artefacto pusieron la denuncia.

Tagadá - Caupicho - Accidente
Los familiares de los menores que se accidentaron en Caupicho quieren que el dueño del parque dé la cara.GUSTAVO GUAMAN

Los juegos mecánicos vetustos o deteriorados continúan destrozando familias en el país. La tarde del domingo 13 de marzo, tres personas, entre ellas dos menores de edad, salieron ‘volando’ de un tagadá en el sector del Guasmo, en el sur de Guayaquil.

El adolescente fue dado de alta, mientras que su hermana continúa con cuidados médicos. La otra mujer golpeada también está hospitalizada.

Entretanto, en la capital, los familiares de los dos chichos que también salieron despedidos de una atracción mecánica similar, el viernes 11, en Caupicho, fueron ayer a la Fiscalía para colocar la denuncia en contra del dueño del parque de diversiones, quien todavía no da la cara.

María Charicando no dejaba de llorar en las afueras del Hospital Baca Ortiz, su hija todavía no despierta del coma. La joven tiene rota una pierna y el brazo. Su cuello está fracturado y perdió los dientes delanteros. Su estado es crítico.

sicariato

Portoviejo: Sicarios mataron a un hombre de 41 años dentro de su auto

Leer más

Desde el día de la tragedia, la mujer ha dormido en las sillas de la sala de emergencia. “El domingo entré un rato a verla y sigue entubada. Me duele ver a mi única hija así”.

Su esposo, Efraín Condo, pidió permiso en su trabajo ayer para ayudar a Charicando y que ella fuera a descansar. El hombre esperaba a que le dieran los exámenes médicos para adjuntarlos a la denuncia.

Cerca de ellos se paseaba Jhonny Tipán, hermano mayor del otro adolescente que resultó herido. El menor fue sedado para que no sintiera dolor y espera a que lo intervengan quirúrgicamente. Permanece en la unidad de cuidados intensivos.

Mientras tanto, el parque de diversiones sigue cercado por cintas de seguridad de la Policía y con el sello de clausura.

Desde la Administración Zonal de Quitumbe informaron que todavía no encuentran al propietario del centro de atracciones, quien debería hacerse responsable si se determinara un delito en su contra.

El hombre no tenía los permisos de funcionamiento para la actividad económica que realizaba. Ni siquiera tenía protocolos de bioseguridad. 

Un perno habría ‘anunciado’ la desgracia, pero lo ignoraron

En la cooperativa Guayas y Quil 2, del Guasmo, en el sur de Guayaquil, ya se hablaba de la posibilidad de una desgracia con uno de los juegos mecánicos que, el pasado viernes, se habían instalado en el sector.

Así lo comentó la lugareña Lucía Sohos, quien ayer explicó que la mañana del sábado un perno habría salido proyectado desde un tagadá hacia la casa de un vecino, quien lo devolvió a los encargados del parque de diversiones ambulante.

Según la moradora, se pidió a los encargados que revisaran si todo funcionaba de manera correcta, pero desconoce si tomaron en cuenta sus requerimientos, porque la noche del domingo ocurrió lo que algunos presagiaban: un accidente.

Tagadá - Caupicho - Accidente
En Guayaquil, en la desgracia también estuvo involucrado un juego mecánico conocido como tagadá.Cortesía

En el hecho resultaron heridas, por lo menos, tres personas, entre ellas dos adolescentes, quienes tienen 15 y 16 años. Un varón es el menor y recibió el alta médica de inmediato, mientras que su hermana seguía hospitalizada, por una desviación en una clavícula, comentó su padre de crianza.

La otra perjudicada es una mujer que vive en una barriada cercana al sitio donde estaban los juegos mecánicos. Sus vecinos comentaron que, al parecer, no había regresado a su casa desde que sufrió el percance.

El papá de los adolescentes recordó que la noche del domingo una mujer, quien se presentó como encargada de los juegos, le prometió de parte del dueño que se harían cargo de los gastos, pero ayer ya no podía contactarla, porque su número estaba fuera de servicio y, del sitio donde hacían base con el tagadá, se habían retirado en horas de la madrugada.