Moradores de la parroquia Palo Quemado, en el cantón Sigchos de Cotopaxi, alertaron a través de redes sociales sobre la presencia de policías y militares desde la tarde del lunes 18 de marzo. Estas denuncias surgieron en el contexto de una consulta previa en curso.

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El martes 19 de marzo, líderes del Movimiento Indígena y Campesino de Cotopaxi (MICC) convocaron una conferencia de prensa para rechazar la intervención de las fuerzas del orden en Palo Quemado. Anunciaron que las organizaciones de segundo grado permanecerían en asamblea continua y que, si fuera necesario, se trasladarían al lugar en defensa de los territorios.

Rosa Masapanta, residente de Palo Quemado, participó en la rueda de prensa y expresó su preocupación por la situación, denunciando presuntas agresiones sufridas por habitantes locales. Afirmó que la comunidad se opone a la minería en la zona, ya que temen que afecte su modo de vida, centrado en la producción de panela.

La falta de respuesta de las autoridades provinciales ante la situación preocupaba a Masapanta y otros residentes, quienes pedían una intervención urgente.

El presidente del MICC, Alex Toapanta, manifestó su preocupación por la presencia de personas ajenas al territorio y anunció la activación de guardias comunitarias en respuesta. Criticó el Manual de Consulta Ambiental y cuestionó las acciones legales contra comuneros locales, argumentando que la zona no presenta problemas de delincuencia.

Hasta el momento, el Gobernador de Cotopaxi, Iván Navas, no ha dado una respuesta sobre el incidente en Palo Quemado, a pesar de las solicitudes de información realizadas por diario Extra desde la semana pasada.

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