SUSCRIBIRME POR $1/ 1 MES

Exclusivo
Actualidad

Quito: En la trágica granizada murió un árbitro

EL hombre que murió tenía 35 años y deja a cuatro niños en la orfandad. Otras tres resultaron heridas y se recuperan en varios hospitales.

Muerto - Cancha sintética - Quito
Las instalaciones deportivas contaban con los permisos de funcionamiento, según el Municipio de la capital.GUSTAVO GUAMAN

David Zumárraga se siente agradecido con Dios por una nueva oportunidad de vida, luego de que se cayera el techo de una cancha sintética, en el norte de Quito, en la que él dirigía como árbitro, la tarde del sábado.

Sin embargo, uno de sus compañeros, Jimmy Carcelén, no tuvo la misma suerte y murió aplastado por la estructura, que cedió por la granizada que se acumuló en la misma. Además, otras tres personas resultaron heridas y se recuperan en distintas casas de salud de la ciudad.

Zumárraga dijo que minutos antes de que se desarrollara el partido en esa cancha, el organizador del evento le dijo que él ya no pitaba y que lo reemplazaría Carcelén.

Cuando empezó a caer el granizo, el hombre señaló que los árbitros suspendieron algunos cotejos porque no se escuchaban las órdenes que daban ni las indicaciones que gritaban los jugadores.

Perdió a su hijo en el Día de la Madre

Los Ríos: Madre perdió a su hijo en accidente en su día

Leer más

Según el relato de Zumárraga, las personas presentes se asustaron cuando el agua empezó a caer por los costados de la tribuna. “Nadie nos dijo que evacuáramos”, mencionó.

De pronto, se escuchó un estruendo y luego de eso la gente gritó desesperadamente. Zumárraga vio cómo un joven salió con el brazo ensangrentado mientras otro chico gritaba: “Mi padre tiene rota la pierna”.

El réferi se dio cuenta de que su compañero no salía de los escombros y fue a buscarlo con otros deportistas. Lo vieron debajo de una baranda de hierro. Intentaron alzarla entre todos, pero no pudieron.

“Lo abrigamos con algunas chompas por el frío”. Al lugar llegaron paramédicos del Cuerpo de Bomberos que confirmaron la muerte de Carcelén. El hombre tenía 35 años y deja a cuatro hijos en la orfandad. Los dueños de la cancha dijeron que se harán cargo de los gastos funerarios.