En apenas dos horas, dos sitios turísticos de los cantones Guayaquil y Durán se empañaron de sangre. En la urbe porteña, un turista holandés fue asesinado durante un asalto; mientras que en la segunda localidad guayasense, un grupo de personas fueron atacadas a tiros mientras conversaban.

Los hechos se registraron entre las 21:00 y 23:00 del miércoles 19 de enero. En ambos casos, no se reportaron detenciones hasta el cierre de esta edición.

En el barrio Las Peñas

El primer hecho delictivo se suscitó en el bar El Faro del Cerro, ubicado junto al escalón 355 del barrio Las Peñas, en el cerro Santa Ana. A ese lugar, según contó un morador bajo reserva, llegaron dos delincuentes para asaltar a los pocos clientes que había en el sitio.

“Les quitaron los teléfonos celulares, billeteras... Pero cuando se acercaron a la mesa donde estaba el extranjero con la novia, él habría lanzado a otro lugar la cartera de ella. Eso habría provocado que el ladrón le dispare”, comentó el lugareño, quien habita a pocos metros.

En consecuencia, los pillos escaparon por un callejón diferente al que utilizaron para llegar, en dirección al sector conocido como La Pampa. “Por ahí siempre escapan, aquí todos lo sabemos porque los robos se cometen a diario”, lamentó el testigo.

Con él coincidieron dos residentes que sí se identificaron, Juan Vélez y Édgar Muñoz. “Tengo 74 años viviendo aquí, porque aquí nací. El problema es que los delincuentes se sienten cómodos porque no hay suficientes policías, porque ellos (los agentes) solo pasan abajo, no quieren subir”, sostuvo el primero.

Muñoz, en cambio, añadió que supuestamente los uniformados “suelen estar chateando en el teléfono”.

El subjefe distrital de la Policía, coronel Manuel Vallejo, defendió el accionar de los gendarmes y aseguró que cuando ocurrió el hecho violento, había agentes a la altura de la escalinata 310 realizando labores de vigilancia.

“Pero esto ya se nos sale de las manos como servicio preventivo. Aquí también tendríamos que reforzarle al personal de Turismo, para mejorar la seguridad en las escalinatas”, dijo el oficial.

Ambulancias habrían tardado

También detalló que tras ser alertados por los guardias del sector, los uniformados actuaron de inmediato para atender la emergencia. Sin embargo, las ambulancias que solicitaron al 911 “demoraron en llegar, aproximadamente 35 minutos. No les digo que tal vez hubiéramos salvado la vida del ciudadano, pero en ese sentido podríamos agilitar más la atención”.

Por ese motivo, el subjefe policial señaló que, de su parte, ha incrementado los controles que se realizan en la zona, para ubicar a posibles delincuentes que busquen ese sector para sus fechorías.

El coronel Vallejo mencionó que se sospecha que los criminales que mataron al ciudadano extranjero serían dos individuos que el año pasado fueron detenidos por tráfico de drogas y armas, pero que fueron liberados en poco tiempo.

Sus identidades no fueron proporcionadas, porque el suceso aún se encontraba bajo investigación.

Disfrutaba con su amada

El ciudadano holandés fue identificado como Vogel Cornelis Jacob, de 56 años. Él se encontraba en el bar junto a su novia, una ecuatoriana residente en Alemania con la que había viajado a nuestro país para conocerlo, según fuentes policiales.

Ella, en una versión preliminar a los investigadores, contó que estaban tomando unas cervezas cuando los delincuentes ingresaron para despojarlos de sus pertenencias, entre estas sus teléfonos celulares, pero su novio se habría puesto de pie y en ese instante fue atacado por uno de los criminales.

Las autoridades ecuatorianas gestionaron a la mañana siguiente el contacto con los familiares del fallecido.

Atacados con pistola y fusil

En el malecón de la ciudadela Abel Gilbert, a dos cuadras de una Unidad de Policía Comunitaria (UPC) y de la estación de la Aerovía, seis personas fueron atacadas a tiros por individuos que se movilizaban en un automóvil, posiblemente un Hyundai azul modelo i10, sin placa.

Los sujetos, con una pistola y un fusil, ejecutaron 33 disparos y luego escaparon. El jefe policial de la localidad, coronel Jorge Hadathy, explicó que no podía dar mayores detalles del suceso, porque el caso aún estaba en investigación previa.

En la zona, algunos lugareños lamentaron la falta de controles, considerado por los lugareños como el más turístico del cantón, porque a ese lugar llegan quienes pasean en la Aerovía.

Ante eso, el coronel Hadathy indicó que “en el mismo circuito estábamos deteniendo a dos personas con dos motos robadas. El trabajo policial está ahí. Mientras estábamos en ese procedimiento, se da este evento lastimosamente”.

Los heridos fueron identificados como Alexander Laborde, Luis Zambrano, Erick Vega, Diego Pazmiño, Luis Barros y Wilmer Murillo, de entre 19 y 25 años, sin antecedentes penales.