Cada 31 de diciembre, cuando faltan cinco minutos para las 00:00, la canción ‘Yo no olvido el año viejo’, suena a todo volumen. La gente baila, algunos lloran, otros se abrazan. Todos despiden al año viejo con esta melodía que hace 65 años es un himno tradicional para esta fecha en toda Lationamérica.

El popular tema fue grabado por el mexicano Tony Camargo, quien cada año renace entre las familias latinas, a son de cumbia. El intérprete reside en Mérida, Yucatán y fue contactado por el medio de comunicación TeleDiario, de México, a quienes les contó cómo surgió su mayor éxito.

‘Yo no olvido el año viejo’ es una composición del colombiano Cresencio Salcedo, a quien Camargo no conoció, porque nunca tuvo la oportunidad de visitar Colombia. El nexo entre ellos se dio por amigos artistas. Así surgió la canción donde el autor se da por satisfecho por tener una chiva, una burra negra, una yegua blanca y a una buena suegra.

Según documenta TeleDiario, así parece ser en la vida real Tony, que radica en una modesta casa de la calle Sesenta del Centro de Mérida.

A sus 91 años, y después de haber enviudado, su único ingreso fijo es su un sueldo de dos mil pesos al mes por cantar con la orquesta del ayuntamiento con el que cubre sus gastos para él y sus tres perros. A pesar de que su tema se ha mantenido vigente en toda América Latina, el artista asegura que nunca recibió regalías por la ejecución del tema el año viejo.

Tony nació en 1926 en Guadalajara, Jalisco dentro de una familia de cantantes de carpa. De hecho, confesó que casi a la fuerza se introdujo en el mundo artístico cuando tenía siete años de edad.

Desde ahí canta, y jura que lo seguirá haciendo con agrado hasta el fin de sus días, porque aunque su voz se apague, seguirá sonando cada Fin de Año.

Este clip, donde aparece Camargo, pertenece al álbum: Las número 1 de la música tropical.