¿Te pasa que llega un momento del día en que te dices a ti mismo: quiero comer un helado, una hamburguesa o tiene algún “antojo”? Eso puede deberse a que tienes hambre emocional o ansiedad.

La ansiedad alimenticia es el deseo innecesario por comer y se produce, en muchos casos, por trastornos emocionales, estrés laboral, depresión, tristeza, presión social o simplemente por aburrimiento, además por no saber escoger alimentos adecuados para mantenernos por más tiempo satisfechos, dice la nutricionista Dayana Vera.

Su colega, Omar Vargas, indica que uno de los efectos del deseo compulsivo de comer es la afectación al metabolismo ya que el individuo de una u otra manera empieza a consumir alimentos para pretender satisfacer alguna necesidad física, emocional o corporal y, por ende, se ven afectados, a más del peso, sistemas metabólicos como el páncreas, la vesícula, entre otros.

Ellos recomiendan tener organización en comidas y el tiempo que se le dedica a estas para controlar la ansiedad.

Este es un listado de cinco tipos de alimentos para controlar la ansiedad:

Alimentos ricos en Omega 3:

salmón

sardinas

aguacate

nueces

semillas de chía

Alimentos ricos en magnesio:

acelga

espinacas

frijoles

brócoli

pepino

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Alimentos ricos en triptófano aminoácido que regula nuestro estado de ánimo:

pavo

nueces

almendras

avellanas

avena

Alimentos ricos en antioxidantes:

frutas

chocolate negro

lentejas

aceite de oliva

canela

Alimentos ricos en fibra:

avena

nueces

almendras

pasas

naranja

salvado de trigo