Buena Vida
Facebook hace caer a uno de los mafiosos más buscados de Italia
Giullio Perrone, uno de los fugitivos más buscados de Italia fue detenido en México gracias a una de sus publicaciones en Facebook.

Giulio Perrone, uno de los integrantes de ‘primer nivel’ de la mafia italiana, fue condenado a 20 años, 11 meses y ocho días de prisión según los informes de la fiscalía.
Giullio Perrone, uno de los fugitivos más buscados de Italia fue detenido en México gracias a una de sus publicaciones en Facebook.
Sugún informes de la cadena de noticias DW, la fiscalía mexicana comunicó el pasado viernes 10 de marzo que realizó la captura del capo italiano. Perrone de 64 años tenía una notificación roja de la Interpol para su búsqueda internacional.
El capo había creó una cuenta en Facebook con su nombre y utilizó el apellido materno para no ser identificado. La policía de Napoles señaló que había empezado a publicar fotografías y detalles que revelaron su ubicación, como la imagen en la que muestra de fondo un mural mexicano. La información fue confirmada por la policía cibernética de México.
Giulio Perrone, uno de los integrantes de ‘primer nivel’ de la mafia italiana, fue condenado a 20 años, 11 meses y ocho días de prisión según los informes de la fiscalía.
Hasta este momento, Perrone estaba en México de manera irregular. En el operativo para su detención en el estado fronterizo con Estados Unidos, las autoridades encontraron dos identificaciones falsas con su fotografía.
Existen otros casos de varios criminales que han sido capturados por sus publicaciones en redes sociales.
Domenico Palazzotto, era una de las cabezas de la mafia siliciana. En este caso también creó una cuenta de Facebook con un nombre falso para mostrar su lujosa vida. Las constantes publiac´ones alertaron a la policía que finalmente logró arrestarlo.
Hace algunas décadas los integrantes de estas organizaciones delictivas se regían por normas de conducta que mantenía su anonimato. No comer en lugares públicos, vivir en casas modestas para no llamar la atención eran algunos de los ‘códigos de discreción’ que caracterizaba a los integrantes de estas mafias.