¿Afeitar el choclo y usar su barba? Más bien, deshojarlo y retirar esos ‘cabellos’ dorados que le sobran. Suena a chiste, pero no lo es.

Esa barbita, es más conocida como ‘pelo de choclo’ —quizás te suene ese nombre más como apodo— y resulta que en aquellas delgadas tiras guarda propiedades medicinales.

En México, por ejemplo, se ha ‘peinado’ tanto esta ‘barba’ (espiga de maíz) que dos estudiantes sacaron un saborizante en polvo a partir de ella.

El producto final fue Kaana Kin, que en lengua maya significa Mar y Sol, según reporta el portal web Reporte Indigo.

¿Dónde está su lado milagroso? Pues que como es un diurético natural —lo mismo que produce la cerveza que te manda a cada rato a orinar— estos pelos de choclo empaquetados sirven para eliminar cálculos renales.

Así que aplica decir: mientras tú ignoras esa barba, otros la usan para ‘milagros’.

Y aunque los más beneficiados en esta historia sean los riñones, el sitio web de la enciclopedia del maíz también le atribuye sanación en dolores musculares, problemas digestivos, diabetes, colesterol y presión arterial.

Ojo, que no todo es bueno

Hasta ahí suena bien, pero Israel Carchi, naturópata y especialista en medicina china, no le tiene tanta fe al pelo de choclo y explica el porqué: “El choclo en este tiempo es un producto transgénico y es fumigado con químicos muy fuertes, por ser propenso normalmente a plagas”.

Y aunque reafirma el hecho de sus cualidades como que tiene hierro, zinc y que estas a su vez “ayudan a la formación de hemoglobina y normaliza la función enzimática”, asegura que esos dos componentes están presentes en la espiga en muy bajas cantidades y reunirla para preparar infusiones no valdría tanto la pena.

Él es parte del staff de la farmacia online The Panda y añade que debido a ese inconveniente con la calidad del ‘pelo’ no recetan nada que lo contenga.

El único consejo entonces es que si vas acudir por este remedio casero para aliviar a tu organismo, te asegures de que sea orgánico; es decir, que salga de un huerto donde sea poco probable el uso de insecticidas.