Ser padrastro o madrastra tiene su límite
Conoce tu rol y tus limitaciones.

Ser pareja de alguien con hijos es todo un desafío.
Ser padrastro o madrastra puede ser satisfactorio o desafiante. En algunos casos, los miembros de la nueva familia pueden llevarse de maravilla, pero en otras ocasiones surgen dificultades. Estas pueden generar algunas confusiones o incluso conflictos con tu pareja, el excónyuge de tu pareja, y los hijos de ellos.
Es verdad que no hay una fórmula infalible para crear la familia "perfecta", pero es importante afrontar esta nueva situación con paciencia y tratar de comprender los sentimientos de todos los involucrados.
Por ello, la psicóloga Selena Villacrés recomienda que antes de constituir una relación de pareja con una persona que ya tiene hijos es necesario entender la importancia de que el vínculo entre padres e hijos se mantenga fuerte para que todo alrededor funcione adecuadamente.
"Los hijos no deben sentirse abandonados en ningún momento, y mucho menos ante la llegada de una persona nueva a la familia", dice la profesional. Evita sobrepasar estos límites para tener mejores resultados.
Lo que NO debes hacer
- Tratar de ocupar el lugar del papá o de la mamá. Aunque quieras a los hijos de tu pareja como si fueran tuyos, no lo son. Debes respetar los métodos de crianza y no exigirles que te traten como esa persona de la familia que ya no está.
- No puedes castigarlos. La experiencia de un castigo físico proveniente de un nuevo integrante de la familia puede deteriorar definitivamente la relación. Cuidado caes en desgracia con la familia de tu amada o amado. El derecho para tomar decisiones y establecer conductas adecuadas debe estar reservado para los padres.
- No te involucres en los problemas de tu pareja con su ex. Aunque no haya una relación sentimental, existe un vínculo fuerte con los hijos. Evita tomarte atribuciones que no son propias en tu posición.