¿Alguna vez has bebido para olvidar? Pues deberías pensar dos veces antes de volver a ‘sumergir’ tus penas en licor. Un estudio realizado por científicos de la Universidad de Exeter, en Reino Unido, ha confirmado que ingerir alcohol causaría el efecto contrario al que comúnmente se espera: beber ayudaría a mejorar la memoria.

En la investigación participaron 88 personas —31 hombres y 57 mujeres— de 18 a 53 años, quienes tenían que realizar un ejercicio de memorización de palabras. Posteriormente, eran separados en dos grupos: a unos se les dejó beber hasta saciarse; en cambio, a los otros, no se les permitió tomar ni una gota.

El siguiente día se les pidió a los voluntarios que recordaran las palabras que habían memorizado en la jornada anterior y se percataron de que el grupo que había ‘chupado hasta el cansancio’ rememoraba más de lo que había aprendido.

“Nuestra investigación no solo mostró que aquellos que habían bebido alcohol mejoraron al repetir la tarea de aprendizaje de palabras, sino que este efecto fue más fuerte entre aquellos que bebieron más”, señaló Celia Morgan, coautora del artículo publicado en la revista Nature Journal Reports.

Los autores mencionan que no saben con certeza qué provocaría ese efecto, pero creen que el alcohol impediría la recepción de nueva información, haciendo que el cerebro tienda a recordar los conocimientos adquiridos recientemente.