La hinchada de Barcelona SC atraviesa un momento de tensión. El malestar contra el entrenador Ismael Rescalvo, que se ha hecho evidente en los últimos compromisos, terminó por desencadenar una situación que golpea directamente al club.

 El Comité Disciplinario de la Liga Ecuabet dio a conocer que los toreros deberán jugar su próximo partido como locales, ante Universidad Católica el 31 de agosto, sin la presencia de sus aficionados.

Una multa y jugar sin aficionados ante Católica

La decisión responde a los incidentes ocurridos en el reciente duelo frente a Macará, en el que Barcelona no solo dejó escapar los tres puntos, sino que además acumuló problemas extradeportivos. En los minutos de adición, varios seguidores lanzaron objetos a la cancha, entre ellos una bengala encendida, lo que encendió las alarmas de seguridad y dejó en evidencia la falta de control en el escenario deportivo.

El informe disciplinario detalló las infracciones cometidas: $2.570 de multa por conducta incorrecta, la ausencia de Bryan Carabalí en la rueda de prensa, la deficiencia en el control de seguridad, lanzamiento de objetos sin impacto, enfrentamientos entre la Policía Nacional y aficionados, ingreso de personas no autorizadas y la utilización de material pirotécnico. 

Todo esto configuró una sanción ejemplar, que golpea tanto en lo económico como en lo deportivo.

Jugar sin su hinchada y esperar finales de septiembre

El cuadro amarillo, que venía arrastrando críticas por su irregularidad en LigaPro, no solo deberá asumir el gasto económico, sino que también afrontará el desafío de jugar sin el respaldo de su hinchada. 

El compromiso ante la Universidad Católica de Quito será el último antes de la pausa por la fecha FIFA, y recién a finales de septiembre, cuando se midan a Sociedad Deportiva Aucas en el cierre de la primera etapa del torneo, los seguidores toreros podrán volver a poblar las gradas del estadio Monumental.

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