Emelec sigue con la mecha encendida y ahora se llevó un triunfo de esos que saben a gloria, en una cancha siempre incómoda como el Bellavista. Un cabezazo de Jaime Ayoví a los 85’ fue suficiente para que los azules se lleven los tres puntos frente a un Técnico Universitario que terminó con nueve jugadores y con la cabeza gacha. Marcador final: 1-0, victoria millonaria y la hinchada empieza a soñar con el hexagonal.

El arranque fue todo del “Rodillo Rojo”. Los locales salieron con más ganas que fútbol, pero la puntería estaba torcida. Técnico tuvo la pelota, la movió, pero no supo romper a Pedro Ortiz, que siempre da seguridad. En cambio, Emelec, que arrancó dormido, tuvo la más clara a los 13’. 

Técnico Universitario se quedó con 9 jugadores

El peruano Alfonso Barco se inventó una jugada de crack, metió un pase quirúrgico y José Angulo, el “Tin”, reventó un remate que llevaba sello de gol. La hinchada ya lo gritaba, pero la caprichosa pelota dio en el horizontal. Angulo no lo podía creer, se tomó la cabeza, era el grito azul que se ahogaba en Ambato.

El local siguió probando. A los 34, Dixon Vera tuvo la suya tras un desborde de Ponguillo, pero Ortiz otra vez se quedó con el balón. Dos minutos después, Pata probó con un remate peligroso que hizo temblar a la defensa azul. Y antes de irse al descanso, el colombiano Jean Carlos Blanco sacó un bombazo, pero Ortiz estaba iluminado. Con el 0-0 se fueron al descanso y la sensación era clara: Técnico mandaba, pero no mataba; Emelec resistía y esperaba su momento.

Ayoví llegó a poner orden en Ambato

En la segunda mitad, Guillermo Duró se la jugó con cambios de peso. Entraron Cristian Cueva y Jaime Ayoví para meterle picante al ataque. Y el partido dio un giro. A los 63, la desesperación ambateña pasó factura: plancha durísima de Ponguillo sobre Maicon Solís y roja directa. El Bellavista se quedó helado, Cumbicus no lo podía creer, Técnico se quedaba con 10.

Pero el drama no terminó ahí. A los 75, Marlos Medranda, por hacerse el vivo con la quema de tiempo, vio la segunda amarilla y también se fue a las duchas. Con nueve jugadores, el “Rodillo” estaba liquidado.

Emelec lo olió, lo sintió, lo buscó. A los 80 Alexander González tuvo una clarísima, pero el arco parecía cerrado. Sin embargo, el fútbol siempre da revancha. Minuto 85, Romario Caicedo mete un centro con clase y Jaime "La Yoya"  Ayoví, conecta un cabezazo letal. Fiesta azul en Ambato, los jugadores se arrodillaron a agradecer, y la hinchada que viajó celebró como si fuera una final.

El bombillo está encendido, se aferra a la ilusión y mete presión en la pelea por entrar al hexagonal. Con calle, con garra y con gol, Emelec volvió a rugir.

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