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Piden que no pierdan la fe
Redacción Guayaquil
En la cancha su misión es infundir miedo y destruir todo el buen juego que tenga el equipo contrario. Ellos no dan por perdida una pelota, dicen que tienen cara dura y que las sonrisas las dejan para fuera del césped.
Oswaldo Minda, de Barcelona, y Fernando Gaibor, de Emelec, son los volantes defensivos, pero tienen un corazón gigante y esto se ha palpado con su forma de pensar sobre el terremoto.
Están prestos para apoyar y dicen que el regreso del torneo puede esperar. Lo primero son las personas que están en problemas en las provincias de Manabí, Esmeraldas y Los Ríos.
GAIBOR: “Dios noshace un llamado”
Fernando Gaibor, el volante de Emelec, es muy serio en hablar de fútbol, pero lo suscitado por el terremoto lo hace poner los pies sobre la tierra, porque sabe que esto le puede suceder a cualquier país.
El jugador tiene claro que esto es un llamado del Todopoderoso. “Dios nos pide que reflexionemos y dejemos a un lado toda la competencia que existe entre nosotros, como la envidia y muchas cosas negativas”, expresa.
Gaibor, que ha tenido regularidad en los últimos partidos, va más allá de la solidaridad entre ecuatorianos y hace un pedido especial: “Debemos ser más humanos y tratar de salir adelante de esta lamentable situación que vivimos”.