Luego de 18 días de incesantes operaciones de rescate, este 5 de octubre fue hallado el cuerpo sin vida del cabo segundo Elvis Marcos Bermeo Alvarado, de 27 años. Él permanecía desaparecido desde el pasado 18 de septiembre, cuando fue arrastrado por la corriente del río Quijos durante un ejercicio de entrenamiento militar en el sector de Guagrayacu, en la provincia de Napo.

El hallazgo se produjo luego de una extensa jornada de rastreo coordinada desde el Puesto de Mando Unificado (PMU). Desde las primeras horas de ese día, miembros del Cuerpo de Bomberos Quijos, Bomberos El Chaco y equipos del Grupo RPAS (drones) de Bomberos Quito realizaron un operativo combinado que incluyó sobrevuelos de reconocimiento, maniobras fluviales y exploración en el área de la represa, aprovechando la apertura de compuertas para reducir el caudal.

Pese a que en un inicio no se obtuvieron resultados positivos, cerca del mediodía kayakistas que participaban en la operación informaron el hallazgo de un cuerpo a orillas del río. De inmediato, la Unidad de Rescate Acuático del Cuerpo de Bomberos Quijos, con apoyo de dos miembros del Grupo GEMA, realizó la extracción del cadáver, que posteriormente fue levantado por personal de Criminalística conforme a los protocolos legales.

El cuerpo correspondía al cabo Bermeo Alvarado, oriundo de Santa Clara, provincia de Pastaza, quien contaba con cinco años y seis meses de servicio en la institución policial. La confirmación de su identidad cerró una búsqueda que mantuvo en expectativa a familiares, compañeros y unidades de rescate que durante más de dos semanas trabajaron en condiciones adversas a lo largo del cauce del río Quijos.

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Un entrenamiento dejó un primer fallecido en Quijos

Las labores comenzaron tras el trágico incidente registrado la tarde del 18 de septiembre, alrededor de las 14:35, cuando el Distrito Valle de Quijos reportó la desaparición de dos uniformados durante una práctica de patrullaje en selva y pruebas de estanquidad de mochilas. En aquel ejercicio, el cabo Jefferson Pablo Guzmán Tuquerre, también de 27 años, fue arrastrado por la corriente. En su intento por rescatarlo, Bermeo Alvarado se lanzó al afluente, pero ambos fueron vencidos por la fuerza del agua.

Un sargento, instructor de la práctica, logró ubicar a Guzmán y aplicó maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP). Sin embargo, el joven policía, oriundo de Cayambe, provincia de Pichincha, ya no presentaba signos vitales.

Desde entonces, los Cuerpos de Bomberos de Baeza, El Chaco, Quijos, junto con personal especializado del Grupo GEMA, mantuvieron un operativo constante de búsqueda y recuperación, con la colaboración de la Fiscalía y autoridades locales.

Tras el hallazgo, el Cuerpo de Bomberos Quijos expresó su profunda solidaridad y condolencias al Grupo GEMA y a la familia del cabo Bermeo, destacando su entrega y vocación de servicio. “El compañero Elvis Marcos Bermeo Alvarado entregó su vida en el cumplimiento del deber. Su compromiso y valentía permanecerán en la memoria de quienes compartieron con él la misión de servir y proteger”, señaló la institución en un comunicado oficial.

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