Marcela Aguiñaga volvió al centro de la tormenta interna del correísmo este jueves 20 de noviembre, luego de que Rafael Correa lanzara un mensaje directo contra la prefecta del Guayas. 

El expresidente aseguró que será “el primero en oponerse” a su reelección, tras la aparición pública de Aguiñaga junto a Lourdes Tibán y al alcalde Aquiles Álvarez en Guayaquil.

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El detonante fue un video difundido por la propia prefecta, donde afirmaba que para trabajar en la recuperación de la cuenca del río Guayas “no hay banderas políticas”. La frase no cayó bien en las filas del correísmo más duro.

“Después de salir con Lourdes Tibán bajo el argumento de que no hay ‘banderas políticas’ para trabajar —que sí las hay, como también debe haber dignidad— seré el primero en oponerme a la reelección de Marcela Aguiñaga", dijo en su cuenta de X

El encuentro que encendió la mecha

La reunión que disparó el conflicto ocurrió la mañana del jueves en el Palacio Municipal de Guayaquil. Aguiñaga participó junto a Lourdes Tibán y Aquiles Álvarez en la presentación de la mancomunidad de siete prefecturas para intervenir la cuenca del río Guayas.

El mensaje central del acto fue la cooperación interinstitucional más allá de las diferencias políticas. De hecho, en el video oficial, Aguiñaga insiste: “Aquí no importan las banderas políticas, lo importante es la ciudadanía.”

Para el entorno de Correa, esa frase representa una ruptura con la línea partidista. Y el líder del movimiento lo dejó claro al respaldar a Luisa González, quien ya había cuestionado a Aguiñaga en meses anteriores. "Luisa tenía toda la razón. Jamás claudicaremos en principios.”, escribió Correa en X.

Una tensión que venía creciendo

La relación entre Aguiñaga y González se deterioró públicamente tras las elecciones de 2023, con críticas sobre el manejo interno del movimiento y la conducción en Guayas. La publicación de este jueves solo aceleró un conflicto que ya estaba latente.

El mensaje de Correa —“Luisa tenía toda la razón”— reacomoda las piezas dentro de la RC y marca una postura oficial del liderazgo histórico frente a la prefecta.

Un golpe directo al interior del movimiento

El pronunciamiento llega en un momento de reestructuración para la Revolución Ciudadana, que intenta recomponerse tras derrotas electorales y fracturas evidentes entre sus principales figuras.

La frase “jamás claudicaremos en principios” proyecta un cierre de filas en torno a González y una presión explícita para impedir que Aguiñaga busque un nuevo periodo en la Prefectura del Guayas.

Por ahora, Aguiñaga no ha respondido al ataque. Mientras tanto, el correísmo enfrenta otra sacudida que confirma que la unidad interna todavía está lejos.

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